El 2025 se proyecta como un año clave para Gremio y también para Erick Noriega, quien atraviesa una dura etapa de recuperación tras su lesión al tobillo, mientras el club ajusta los últimos detalles para definir a su próximo entrenador. La nueva directiva tomó el control con un plan claro: renovar la estructura deportiva desde arriba, empezando por el comando técnico. Y en ese escenario, el nombre que más ruido genera no es cualquiera, sino un estratega europeo que viene de trabajar con figuras de élite como Cristiano Ronaldo y que podría cambiar el día a día del equipo gaucho.
El ambiente en Gremio se transformó, apenas asumió la nueva dirigencia, encabezada por Odorico Roman. La salida de Mano Menezes, que se concretó en medio de emociones divididas entre la hinchada, abrió la puerta para que el club comience a evaluar alternativas con mayor proyección internacional. En ese proceso, la figura del portugués Luis Castro comenzó a destacar como la opción que más agrada, tanto por su experiencia reciente como por su estilo de trabajo.
Castro, de amplia trayectoria en el fútbol europeo y asiático, estuvo hasta hace poco al mando del Al Wasl de los Emiratos Árabes Unidos. Antes de eso, tuvo un paso muy mediático por Al Nassr, donde coincidió con Cristiano Ronaldo y gestionó un plantel repleto de nombres de peso. Ese antecedente, sumado a su paso por Botafogo, lo posiciona como un técnico capaz de adaptarse al ritmo del balompié brasileño.

Mientras la negociación avanza, se sabe que el entrenador portugués se ha reunido con parte de su staff en Dubái para preparar su posible llegada. En caso de concretarse el acuerdo, arribaría con un equipo técnico completo que incluye asistentes, analistas y preparadores físicos, lo que refuerza la idea de un proyecto integral para Gremio en 2026.
A nivel institucional, la directiva busca cerrar la operación cuanto antes debido a la cercanía del inicio de la pretemporada. El cronograma ya está establecido: los trabajos arrancan en los primeros días de enero y el estreno oficial del año será ante Avenida por el Campeonato Gaúcho. De concretarse la contratación, Castro tendría poco tiempo para ajustar detalles, pero contaría con respaldo total desde las oficinas del club.
Este movimiento también impacta de forma directa en el futuro de Erick Noriega. El volante peruano, que venía acumulando minutos y confianza antes de su lesión, está en plena rehabilitación y se espera que vuelva recién en 2026. La llegada de un nuevo comando técnico podría reconfigurar su rol: mientras con Menezes tenía un espacio claro en la rotación, con Castro podría abrirse una competencia distinta, incluso con la posibilidad de evaluarlo en más de una posición.
El caso del peruano toma relevancia porque el estilo del técnico portugués se caracteriza por priorizar planteles intensos, ordenados y con salida limpia desde el fondo. Ese detalle juega a favor de Noriega, quien ya demostró en Brasil capacidad para adaptarse tanto como central como mediocampista defensivo, algo que podría convertirse en un plus cuando vuelva a estar disponible.
En paralelo, el club trabaja para reforzar su plantilla mientras resuelve asuntos financieros pendientes, especialmente ventas necesarias para liberar cupos de fichajes. La directiva pretende blindar el proyecto antes de anunciar al nuevo DT, y cada movimiento se da con el objetivo de iniciar 2026 con una estructura sólida.
Por ahora, Gremio sigue afinando detalles y el anuncio parece cuestión de tiempo. Para Noriega, la llegada de un entrenador con este perfil podría representar un nuevo inicio en su carrera, justo cuando se prepara para volver a las canchas.