Las calles históricas de la capital peruana se vistieron de gala este domingo para dar inicio a una de las pruebas más exigentes y emblemáticas del calendario deportivo. En el marco de los Juegos Bolivarianos Ayacucho-Lima 2025, la maratón se convirtió en el centro de atención, convocando a los mejores fondistas de la región en un circuito que partió desde la imponente Plaza Mayor de Lima. La expectativa era máxima, no solo por la dificultad de los 42.195 kilómetros de recorrido, sino porque la delegación peruana buscaba dar el primer gran golpe de autoridad en el atletismo y lo logró.
La jornada no pudo tener un mejor desenlace para los intereses nacionales, confirmando una vez más que el fondismo peruano es una potencia a nivel continental. Los atletas locales dominaron, marcando una distancia y metiéndose en el podio no solo en una ocasión, inaugurando así el conteo de medallas doradas en esta disciplina.
El gran protagonista de la jornada masculina fue Ferdinand Cereceda. El fondista nacional realizó una carrera inteligente y llena de resistencia para cruzar la meta en el primer lugar, desatando la euforia de los asistentes. Cereceda detuvo el cronómetro en un tiempo oficial de 2 horas, 16 minutos y 38 segundos, una marca que le valió colgarse la medalla de oro y consagrarse como el nuevo campeón bolivariano de la distancia, ratificando su excelente preparación.

Pero la alegría peruana fue doble en la categoría masculina, ya que el podio tuvo un claro color rojiblanco gracias a un final de fotografía. Ulises Martín Ambrocio protagonizó una llegada espectacular, cruzando la meta apenas tres segundos después que el ganador. Con un tiempo de 2 horas, 16 minutos y 41 segundos, Ambrocio se quedó con la medalla de plata, sellando lo histórico para el Perú.
El podio masculino lo completó un representante de la visita que luchó hasta el final pero no pudo seguir el ritmo de los peruanos en el remate. El ecuatoriano Fernando Moreno Tapia se adjudicó la medalla de bronce al finalizar el recorrido con un tiempo de 2 horas, 18 minutos y 17 segundos. Un poco más rezagado, en la cuarta posición, llegó el boliviano Gualberto Castro Gallego, quien cruzó la meta con un crono de 2 horas, 32 minutos y 23 segundos, cerrando el grupo de vanguardia.
En la rama femenina, la competencia también fue intensa, aunque el primer lugar se escapó por poco. La ecuatoriana Silvia Patricia Ortiz Morocho dio la sorpresa de la jornada al imponer un ritmo inalcanzable y llevarse la medalla de oro. La atleta norteña cruzó la meta con un tiempo de 2 horas, 34 minutos y 54 segundos, demostrando una gran solvencia física para superar a las favoritas locales y llevarse el máximo galardón para su país.
A pesar de no conseguir el oro, las atletas peruanas tuvieron una actuación destacada, asegurando presencia en el podio. Sheyla Eulogio Páucar fue la mejor nacional en la prueba, quedándose con la medalla de plata tras una dura batalla. La fondista peruana registró un tiempo de 2 horas, 35 minutos y 10 segundos, llegando muy cerca de la ganadora y sumando una presea plateada más al medallero general del equipo anfitrión.
El éxito femenino se completó con la medalla de bronce, que también se quedó en casa. Zarita Suárez Núñez realizó una carrera consistente que le permitió asegurar el tercer lugar del podio bolivariano. La atleta nacional cruzó la meta con un tiempo de 2 horas, 36 minutos y 7 segundos, cerrando una jornada muy productiva para el fondismo peruano, que logró meter a dos representantes entre las tres mejores de la competencia.
