Recordar la pandemia del COVID-19 genera mucha nostalgia y melancolía por los duros momentos que se tuvieron que afrontar. Uno de los sectores más golpeados fue el económico, ya que diversas empresas se vieron obligadas a cerrar tras declararse en quiebra y en el Perú, uno de los casos más recordados es el de la empresa de transporte, Cromotex.

PUEDES VER: ¿Cuál es la edad máxima para obtener licencia de conducir en Perú? Esto dice el MTC
Esta empresa de transporte interprovincial tuvo origen en Arequipa en 1985 y con el pasar de los años, se volvió líder en el país, debido a las rutas y calidad de servicio que ofrecía a sus clientes. Sin embargo, tras 35 años, decidió vender su flota de buses a través de redes sociales como parte de su proceso de liquidación.
Cromotex anunció cierre por la pandemia
Cromotex, en su intento por sostenerse dentro del mercado pese a las dificultades que implicaban brindar sus servicios, accedió a un préstamo de más de S/6 millones a través del programa Reactiva Perú, pero no logró recuperarse financieramente. En un comunicado oficial, anunció la radical medida de cesar sus operaciones.
"Los socios con las facultades que les otorga la Ley General de Sociedades, reunidos en Junta Universal de Accionistas, han acordado su disolución y posterior proceso de liquidación en forma ordenada, priorizando las obligaciones en favor de sus trabajadores con nuestros propios recursos", precisó.
Cromotex vendió sus buses por redes sociales
La empresa de transporte interprovincial vendió sus buses a través de redes sociales tras anunciar su disolución en 2020. Como parte de este proceso, Cromotex utilizó sus plataformas digitales, especialmente Facebook, para rematar su flota de buses al mejor postor, en un intento por reducir las pérdidas económicas.
Cromotex vendió su flota de buses a través de redes sociales como parte de su proceso de liquidación.La compañía, de origen arequipeño, ofrecía servicios de transporte de pasajeros y carga a regiones como Lima, Cusco, Arequipa, Trujillo y Chiclayo, llegando a contar con una flota de más de 200 buses. La venta de los buses marcó el cierre definitivo de una de las empresas de transporte más emblemáticas del Perú.