El Barcelona se dio un festín de goles (3-7) en su primer amistoso en Corea el Sur, donde derrotó al equipo de la capital, el Seúl, en un partido con poco rigor táctico pero en el que los azulgranas demostraron todo su potencial ofensivo.
Sacó Flick una alineación con sabor a once titular y, pese al sofocante calor coreano, se activo rápido el Barça sobre el césped del Estadio de la Copa del Mundo.