Cuando el partido pedía calma y jerarquía, apareció el de siempre. Cristiano Ronaldo, el eterno goleador, volvió a demostrar por qué los penales son casi una marca registrada en su carrera. A los 88 minutos del segundo tiempo, con el Kingdom Arena expectante, el luso tomó el balón, respiró profundo y definió con su clase habitual para poner el 3-1 definitivo frente a Al Hilal. El tanto no solo cerró una gran victoria de Al Nassr en la jornada 26 de la Liga de Arabia Saudita, sino que también agrandó el legado de un jugador que, a sus 40 años, sigue compitiendo como si el tiempo no pasara y que ahora suma 931 anotaciones como profesional. Frío, preciso y letal. Así es Cristiano. Y mientras él esté en cancha, el espectáculo está garantizado.
Gol de Cristiano para el 2-1 del Al Nassr

Gol de Cristiano para el 3-1 del Al Nassr
