En medio de la cuenta regresiva para una posible prohibición, el presidente Donald Trump está moviendo sus fichas para evitar que TikTok desaparezca del mercado estadounidense. Con el 5 de abril como fecha límite impuesta para concretar la venta de la aplicación, el jefe de Estado evalúa una nueva orden ejecutiva. ¿En qué consiste? En esta nota te comentamos.

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La estrategia de Trump para mantener a TikTok
Según fuentes cercanas a las negociaciones, la propuesta de Donald Trump permitiría que la empresa matriz china ByteDance conserve el control del algoritmo que da vida a TikTok. Este valioso recurso tecnológico, clave para el funcionamiento de la plataforma, sería alquilado a una compañía estadounidense con participación minoritaria.
Aunque la estrategia parece ingeniosa, no está claro si cumple con la ley bipartidista aprobada por el Congreso, la cual prohíbe cualquier vínculo operativo con entidades extranjeras consideradas adversarias, como es el caso de ByteDance. A pesar de ello, Trump considera que los aranceles recientemente impuestos a China podrían ser usados como ventaja para negociar un acuerdo favorable.
“Los aranceles nos dan un gran poder de negociación”, dijo el exmandatario, dejando entrever que podría intercambiar concesiones comerciales por un trato que salve a TikTok. Mientras tanto, varios gigantes tecnológicos ya se han mostrado interesados en adquirir la aplicación.
Amazon, AppLovin, Oracle y otros grupos han presentado ofertas, aunque todos coinciden en algo: solo invertirán si se les garantiza protección legal frente a posibles demandas futuras. Esto implicaría una modificación legal o la intervención del Congreso, una jugada que aún está en discusión.
La fecha límite de TikTok en Estados Unidos
El reloj sigue corriendo. El próximo 5 de abril es la fecha tope establecida por la administración Trump para que ByteDance concrete la venta de TikTok. De lo contrario, la aplicación podría ser retirada del mercado estadounidense. Aunque aún no hay una decisión final, Trump ya ha declarado que está dispuesto a extender el plazo si no se llega a un acuerdo a tiempo.
Funcionarios de alto nivel han estado evaluando distintas opciones, pero aún no se ha hecho pública una hoja de ruta concreta. Por ahora, el futuro de TikTok en Estados Unidos depende de una compleja combinación de negociaciones políticas, estrategias legales y jugadas diplomáticas. La gran incógnita es si esta jugada maestra de Trump logrará mantener a flote una de las plataformas más influyentes del mundo digital.